Luego de que tres policías fueran acusados de golpear salvajemente a un detenido y de que un video del hecho trascendiera, en las redes estallaron los comentarios a favor y en contra de los uniformados imputados por apremios ilegales. Al mismo tiempo y, posiblemente desde el entorno de los integrantes de la Fuerza bajo la lupa, viralizaron la planilla prontuarial del hombre que resultó seriamente herido en la Comisaría 6ta.
El caso vio la luz de lo público cuando este diario publicó que tres policías habían sido detenidos, sospechados de haberle propinado una brutal paliza a un preso. Más tarde, los imputados se sentaron en el banquillo de los acusados y, aunque negaron haber agredido a la presunta víctima, un registro fílmico de la propia seccional los puso contra las cuerdas.
Las imágenes, en las que se observa el trato que los acusados le dieron al detenido, fueron publicadas y, en ese contexto, hubo quienes criticaron duramente el accionar policial, mostrándose indignados, mientras que otros lo justificaron, poniendo el énfasis en el reo, por lo que se desató una guerra impensada y una grieta entre los usuarios de las redes sociales.
En consonancia con estos últimos, allegados a los implicados o personas afines a la Policía, con acceso a la base de datos, dieron a conocer los antecedentes penales de quien habría recibido la paliza. "Acá les presento a otro ciudadano ilustre, víctima de los oficiales de la Comisaría 6ta", indica el posteo junto a la comisión de al menos 20 delitos contra la propiedad desde el 2005.
Más allá de las expresiones de un lado y del otro de la grieta, el fiscal Iván Grassi investiga al oficial subayudante Cristian Aciar, y los agentes Gabriel Mariño y Alejandro González por la presunta comisión de los delitos de delito de vejaciones y apremios ilegales en concursos ideal con lesiones graves agravadas por ser cometidas en rol de su funcionario público.
El albañil Cristian Morales fue quien quedó internado en grave estado, tras la supuesta agresión de los policías. De 36 años, fue arrestado junto a un amigo la madrugada del lunes 1 de julio en Rawson, tras un altercado en la vía pública y, por esa razón, terminó en los calabozos de la dependencia policial. Morales ingresó caminando y en buen estado, aunque exaltado por haber consumido -presuntamente- sustancias prohibidas. Horas después, su familia lo encontró casi inconsciente, con convulsiones y graves lesiones en la cabeza.
De acuerdo a los relatos, tras negarse a quitarse la ropa ante una orden policial, Morales habría recibido golpes de puño y fue arrojado violentamente contra una pared por al menos dos efectivos. Su amigo, liberado esa misma mañana, fue quien alertó a los parientes sobre la presunta golpiza. Cuando advirtieron la gravedad, la Policía trasladó al albañil en patrullero al Hospital Guillermo Rawson, donde ingresó en estado crítico: presentaba fractura de cráneo, hemorragia interna y debió ser operado de urgencia. Permanece internado en terapia intensiva.
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