En un partido de infarto y lleno de emociones, Independiente venció 1-0 a Boca en La Bombonera, avanzó a las semifinales del Torneo Apertura 2025 y acentuó la crisis futbolística del Xeneize, que volvió a retirarse entre insultos de su gente.
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SUSCRIBITEEl equipo de Julio Vaccari ganó por el golazo de Álvaro Angulo y enfrentará a Huracán en busca de la final. Los hinchas xeneizes explotaron contra Riquelme y la comisión.
En un partido de infarto y lleno de emociones, Independiente venció 1-0 a Boca en La Bombonera, avanzó a las semifinales del Torneo Apertura 2025 y acentuó la crisis futbolística del Xeneize, que volvió a retirarse entre insultos de su gente.
Desde el arranque, el encuentro fue de ida y vuelta. Ambos equipos mostraron ambición ofensiva, aunque sin la precisión necesaria en los metros finales. En la primera mitad, Boca fue más incisivo y contó con las chances más claras. Miguel Merentiel lo tuvo por duplicado: primero con un remate que contuvo Rodrigo Rey y luego con un gol anulado por fuera de juego. La más insólita fue a los 39 minutos, cuando Carlos Palacios, con el arco vacío, envió su disparo a las tribunas tras un centro preciso de Merentiel.
El Rojo también avisó. A los 33, el sanjuanino Matías Giménez aprovechó una distracción en la defensa local, pero se topó con un atento Agustín Marchesín. Sin goles pero con muchas emociones, el primer tiempo se fue con el marcador en cero y una Bombonera impaciente, aunque aún sin la hostilidad que se había visto en partidos anteriores.
En el complemento, los cambios de Mariano Herrón -ingresaron Cavani y Ander Herrera- no surtieron efecto y Boca perdió el control del juego. A los 18 minutos, Álvaro Angulo rompió el cero con una gran jugada individual y un potente remate cruzado que desató la euforia de Independiente. El colombiano había advertido en la previa que se había "guardado un gol para La Bombonera", y cumplió con su palabra.
Con el resultado en contra, Boca cayó en la desesperación. Empujado por la urgencia, pobló el área rival sin claridad y dejó espacios que Independiente aprovechó para contragolpear. Sobre el final, incluso Marchesín fue al área en dos córners consecutivos, pero ni siquiera logró conectar la pelota. En una de esas jugadas, el Rojo estuvo cerca de sentenciar el partido con el arco vacío, pero un error en la definición dejó todo sin efecto por posición adelantada.
El pitazo final desató la furia en las tribunas. "Que se vayan todos" y duros cánticos contra la Comisión Directiva resonaron en una Bombonera caldeada. Mientras Independiente festejaba su pase a semifinales -donde enfrentará a Huracán-, Boca quedaba envuelto en una nueva tormenta interna. En el horizonte cercano, la prioridad será nombrar un técnico definitivo, antes de pensar en el Mundial de Clubes.