Durante la última edición de la Fiesta Nacional de la Tradición, María Ángela García se colgó sobre uno de sus hombros la banda que la identifica como Segunda Paisana, y desde ese entonces hasta hoy en día continúa llevando la insignia con orgullo, sabiendo lo que ello representa para su comunidad y para la provincia en general. Más allá de la representación y de ser, junto con Brenda Ortega, las guardianas de las tradiciones jachalleras, la joven tiene un sueño y concretar el proyecto que la llevó a presentarse, el cual desarrolló de la mano de su profesión: generar espacios de recreación y desarrollo de actividades físicas en Mogna.
Si bien María Ángela vive junto a su pequeño de 4 años y su gran familia en San José de Jáchal, su profesión y la educación la llevó hasta Mogna, uno de los pueblos donde da clases a nivel inicial en una escuela rural. El contacto con los niños, sus padres y la comunidad en general le despertó la inquietud al notar la falta de espacios y necesidad de generarlos.
“Estamos viendo un desarraigo de la comunidad de mi propio pueblo. Mi idea es generar espacios de recreación para que puedan seguir cultivando y cosechando. Esa semillita que sembramos hoy es lo que en el futuro se convertirá en la verdadera cosecha. Más que nada, mi proyecto es darle una esperanza a la comunidad”, comentó una vez que fue elegida, en noviembre del 2024.
En diálogo con Tiempo de San Juan profundizó sobre su proyecto. Comentó que gracias a la educación pudo llegar a los jardines rurales de Niquivil, San Roque, El Volcán, El Fical y Mogna, la localidad donde quiere llevar a cabo la primera etapa del proyecto. “Mi intención es que se puedan crear espacios físicos para realizar actividades recreativas y actividades física, porque es una localidad que no cuenta con ningún servicio donde los chicos, los adolescentes e incluso la gente adulta pueda hacer actividades que son vitales para el desarrollo personal y de la comunidad”, detalló.
Y continuó: “Creo que con las nuevas formaciones se accede a otro tipo de información que se puede volcar en los niños y de esa manera lograr que se desenvuelva en la comunidad. El desarrollo integral de los niños y niñas es fundamental. Una como docente se pone al frente y siempre busca lo mejor para ellos”.
Para María Ángela sería sumamente gratificante poder hacer realidad su sueño, ya que fue la principal motivación que tuvo a la hora de presentarse al paisanado.
Sus días están abocados de lleno a la enseñanza. Mientras durante gran parte de la jornada se encuentra en los jardines rurales, de regreso a su hogar las actividades no culminan. “Mi día se basa en el deporte prácticamente. Trabajó también en un gimnasio donde doy clases de dance fit y también estoy en el Club Deportivo Racing, donde enseño vóley”.
El tiempo que le queda libre lo destina a su pequeño de cuatro años y abocada a las tradiciones familiares, donde no faltan las reuniones masivas para la elaboración de conservas, de salsa de tomate, dulces de membrillo y hasta humitas en chala. Entre risas reconoce que son una gran familia, mayormente integrada por mujeres que gustan de aprovechar los cálidos días que regala Jáchal para recorrer el departamento y sus bondades.
“Contamos con muchos lugares que ofrecen la naturaleza que se puede tocar con las manos, para vivirlo de una manera totalmente diferente. A mi en lo particular me gusta mucho lo que es Valle Encantado en Mogna, donde además de tener paisajes divinos se puede realizar trekking, siempre con un guía especializado. También en el centro de Jáchal tenemos tesoros maravillosos, como el Cristo negro, que se encuentra en el santuario arquidiocesano y es una de las únicas imágenes que hay en Latinoamérica. Eso también marcha mucho nuestra historia”, comenta la orgullosa defensora de las tradiciones jachalleras.
Con un sentido de pertenencia intacto, María Ángela puede pasarse horas hablando de las bondades de su pueblo, de la solidaridad de la gente que habita el departamento y de las riquezas que ofrece la tierra, siendo una ferviente defensora de pueblo natal, llevando con orgullo la banda que se otorgó hace unos meses.