El domingo 10 de noviembre la localidad de Las Flores, en Iglesia, tuvo una jornada más que convulsionada. Una quema de pastizales se descontroló a raíz de la fuerte presencia de viento y el fuego alcanzó tres viviendas, dos de las cuales fueron muy castigadas. Afortunadamente no se tuvo que lamentar víctimas por la tragedia, pero las pérdidas materiales fueron prácticamente totales y para ambas familias el golpe fue durísimo.
El fuego avanzó sobre el área conocida como El Llano, precisamente sobre las casas ubicadas en calle El Jarillal donde la familia Falcón y la familia Vedia se vieron fuertemente afectados. La desesperación al ver como las llamas consumían años de trabajo, esfuerzo y sacrificio a su paso se apoderó de ambas familias en su momento, pero con el paso de las horas las soluciones comenzaron a llegar.
Andrea Deguer, directora de Acción Social de Iglesia comentó que en cuanto tomaron conocimiento sobre el siniestro se hicieron presentes en el lugar para brindar tomar contacto sobre las necesidades, brindar asistencia material como apoyo psicológico. En dialogo con Tiempo de San Juan detalló los trabajos que se continúan realizando como también la historia de cada familia.
Una de las afectadas fue la familia Vedia. Cuando inició el incendio, pudieron rescatar algunas de sus pertenencias que tenían embaladas, listas para su traslado. Sucede que son uno de los adjudicatarios de viviendas que entregó el IPV en el departamento. Se trata del barrio Las Lomas, en Las Flores. “Ellos pudieron rescatar gran parte de las cosas, sobre todo electrodomésticos grandes”, comentó Andrea.
Si bien el protocolo de acción municipal indica ofrecer albergue, en este caso en el Club Sportivo Pismanta, los Vedia decidieron irse hasta la casa de un familiar en Villa Iglesia.
Para ayudarlos, se les hizo entrega de mercadería, carnes, lácteos, insumos de limpieza y se está en permanente contacto para conocer las necesidades, ya que muchas de ellas van surgiendo con el pasar de las horas.
Quienes se vieron más complicados fue la familia Falcón. Ellos perdieron absolutamente todo, no solo la vivienda, sino una fuente de ingreso importante, ya que en el mismo domicilio funcionaba un negocio bastante completo. Incluso comentan que la semana pasada habían hecho la compra de stock para todo el mes, el cual quedó consumido por las llamas. “Contaban con un depósito que tenía más de 20 bolsones de azúcar, mercadería varia y alrededor de 150 kilos de pollo dentro de un frezzer que quedó reducido a nada. Hasta la documentación se les quemó”, precisó la funcionaria municipal.
Tras el incendio se trasladaron a la casa de un familiar, en Rodeo, y desde la Municipalidad se les asistió con artículos de la canasta básica como también colchones, sabanas y frazadas durante las primeras horas.
Andrea aseguró que, como funcionaria de Acción Social, sabe de primera mano las necesidades que hay en el departamento en torno a las viviendas. Ambas familias alquilaban en el lugar y si bien una de ellas tiene casa asegurada por el IPV, quienes perdieron absolutamente todo no tienen a donde ir. Es por ello que se buscó una solución que fuera pronta y definitiva.
“Se ha decidido ayudarlos con una vivienda. La Municipalidad les va a dar el lote y aportará la mano de obra, y estamos haciendo gestiones con empresas privadas que se están comunicando para ayudar, para conseguir los materiales y poder construirles una casa”, confirmó Andrea. Esto sin duda será de gran ayuda a los iglesianos que no solo se quedaron sin techo, sino también sin trabajo.
La funcionaria municipal aseguró que continuarán con el contacto y la asistencia de ambas familias, hasta que puedan acomodarse ya que las soluciones no son de la noche a la mañana.
Pese a la tragedia que sacudió a la comunidad, la ayuda no demor5ó en llegar. Incluso desde el Ministerio de Familia y Desarrollo Humano, su titular, Carlos Platero, mantuvo comunicación esta mañana con las autoridades departamentales para ayudar a los damnificados que perdieron todo por una quema de pastizales que se salió de control.