Luego de 37 años, Anna Wintour, conocida popularmente como la “emperatriz de la moda”, renunció a su puesto como editora jefe de la edición mensual de Vogue. El anuncio de su partida fue confirmado por la reconocida revista.
Para continuar, suscribite a Tiempo de San Juan. Si ya sos un usuario suscripto, iniciá sesión.
SUSCRIBITEAnna Wintour, quien inspiró la reconocida película “El diablo viste a la moda”, dejó su lugar como editora de la revista Vogue.
Luego de 37 años, Anna Wintour, conocida popularmente como la “emperatriz de la moda”, renunció a su puesto como editora jefe de la edición mensual de Vogue. El anuncio de su partida fue confirmado por la reconocida revista.
El portal web de la prestigiosa revista difundió: “Anna Wintour informó al equipo de Vogue que la revista buscará próximamente un/a jefe/a de contenido editorial. Si bien Wintour continuará como directora de contenido de Condé Nast, supervisando la gestión editorial de marcas como WIRED, Vanity Fair, GQ, AD, Condé Nast Traveler, Glamour, Bon Appétit, Tatler, World of Interiors, Allure, Teen Vogue, Ars Technica y Them a nivel mundial, así como directora editorial global de Vogue, el/la nuevo/a jefe/a de contenido editorial de Vogue US liderará las operaciones diarias de la revista en todas sus plataformas. La persona que ocupe este puesto reportará directamente a Wintour, en consonancia con los/las jefes/as de contenido editorial de todas las revistas de Vogue”.
La mujer más importante e influyente en el mundo de la moda, comenzó a trabajar en Vogue en 1983, cuando a los 38 años ocupó el cargo de directora creativa de la edición estadounidense. Su ascenso continuó, y en 1988 asumió el puesto de editora jefe de la misma edición, cargo que mantuvo hasta el pasado 25 de junio.
Antes de su influyente paso por Vogue, Wintour forjó su experiencia en otras publicaciones de renombre: trabajó en la revista británica Harpers & Queen como asistente de moda de 1969 a 1970. Posteriormente, en 1976, se mudó a Nueva York para desempeñarse como editora de moda para Harper’s Bazaar, rol que ocupó hasta 1983.
Uno de los hitos más significativos de su gestión fue su primera portada en Vogue, la cual resultó ser “disruptiva para su tiempo” y marcó un antes y un después en la industria.
En esta portada, la modelo Michaela Bercu apareció luciendo unos “jean baratos” contrastando con un “sweater Christian Lacroix de 10 mil dólares”, una yuxtaposición captada por el fotógrafo Peter Lindbergh que representó algo “único nunca antes visto en Vogue”. La propia Anna Wintour comentó en 2012 sobre el impacto de esta portada: “Fue algo tan diferente y estudiado y elegante, los close ups típicos de las portadas de Vogue, con mucho maquillaje y joyas deslumbrantes. Rompió con todas las reglas”.
Este fue un momento clave, dado que “Vogue jamás había usado jeans en ninguna de sus portadas ni celebridades” antes de Wintour. Su debut “marcó el avance en todas las revistas de moda” y “dio inicio a una nueva era en el diseño de portadas de revistas que siguió el resto de la industria de la moda y permeó en muchos lados”.
La intimidante personalidad de Anna inspiró incluso al personaje de Miranda Priestly en la célebre película “El diablo viste a la moda”. La película está basada en el libro del mismo título, escrito por Lauren Weisberger, quien fue asistente de la propia Wintour.
Weisberger reveló que se inspiró en “historias míticas narradas por amigos y colaboradores que rodeaban a Anna Wintour”.
Un notable guiño a esta inspiración fue la aparición de Wintour en el estreno de la película, donde llegó “vestida de Prada”. Además de su influencia cinematográfica, Wintour organizó la MET Gala por varios años.