Ahora, como modelo ocasional de un fotógrafo sanjuanino, sus imágenes en silla de ruedas llegaron lejos. Pero Yésica Muratore no es sólo una hermosa mujer, también es protagonista de importantes luchas, que Tiempo de San Juan contó en 2013.
Fue en septiembre de 2011 cuando a Yésica le cambió drásticamente la vida, cuando un accidente de tránsito casi la mata. Quedó con la quinta vértebra destrozada y parapléjica, confinándola a andar en silla de ruedas. La vida se abrió paso porque cuando fue esa tragedia ella estaba embarazada de dos meses. Ella supo darse fuerzas para salir adelante y no sólo eso, además de criar a su hijito, creó una ONG para ayudar a personas en su misma situación y se puso a estudiar la carrera de Martillero Público Nacional.
Reviví la historia de la la joven emprendedora que trabaja en el Ministerio de Turismo: