El Edificio Koss, justamente lleva ese nombre por sus dueños históricos. Ubicado en Laprida y Mendoza en pleno centro sanjuanino, el lugar esconde una disputa por la valiosa propiedad que lleva años y cientos de fojas en la Justicia de San Juan y que tiene como protagonistas a dos familias sanjuaninas. Por un lado, los Koss, por el otro, los Lara.
Este martes se conoció la historia del conflicto desde la mirada de los Koss, Celis Morales viuda de Koss y su hijo Uriel Koss, supuestos damnificados en toda esta puja por el preciado inmueble, quienes denuncian haber sido despojados ilegalmente del edificio familiar y una intrincada trama que pone en tela de juicio el accionar de abogados y de la propia Justicia.
El edificio que reclaman está distribuido en varios inmuebles más chicos que se alquilan, según los Koss administrados ahora por la inmobiliaria de los Lara, como locales comerciales e incluso uno de ellos es alquilado a la Corte de Justicia para que funcione el fuero Laboral. Es una enorme estructura con planta baja que incluye toda una esquina, con sótano; dos locales que ocupa una famosa óptica, también con sótano; un local que vende ropa y otro donde funciona una perfumería; mientras que en la planta alta hay cuatro oficinas.
Los Koss sostienen que es un bien familiar donde funcionaba hace muchos años una escuela de la señora Celis y que les fue despojado por una maniobra que realizaron los Lara, aprovechando que Celis compró una casa mediante esa inmobiliaria y esta última reclamó en su momento una deuda de 300.000 pesos que luego fue ejecutada a su favor por la Justicia, con lo que los Koss terminaron despojados del edificio.
"La verdad que nos hemos encontrado con una cosa bastante turbia sobre la cual han hecho un desapoderamiento, una subasta de los derechos hereditarios de la parte de la escuela de mi mamá. Mi mamá enviudó y nunca pudo poner los bienes a nombre de ella", afirmó Uriel Koss en diálogo con Radio Colón.
"Nos enteramos de que han hecho una subasta express, una subasta privada, que le han ejecutado y le han subastado a la escuela hereditaria. Y encima, no por el valor real de los inmuebles. En el acta de remate en ningún momento está diciendo bien cuánto es lo que se está pagando. Le dan un valor de 300.000 pesos a todos esos inmuebles", agregó el hombre.
"Lara Propiedades es la inmobiliaria que les vendió la casa. Después lo que pasa es que nos hacen una interposición de papeles y directamente nos mandan a remate toda la escuela hereditaria que serían los locales. A mi madre la llevaron a la quiebra porque no se dieron por saciados. Directamente se quedaron con todos estos inmuebles por un precio vil que ahora le están tratando de escriturar por 300.000 pesos", aseguró Uriel.
Larga historia detrás del Edificio Koss
La viuda sostuvo que "el edificio es nuestro porque lo construyó mi suegro. Después pasó a mi suegra que también es fallecida y después pasó a mi marido. Eso es un bien de familia. Yo lo heredo como esposa legítima de Isidro Koss. ¿Qué ha pasado? Yo les compro una casa, pago la casa a un matrimonio que eran los dueños originales y la señora Nelly Lanteri de Lara había intervenido para conseguir el préstamo en el banco del Lavoro en aquel momento para que yo pagara la casa. Cancelo la casa, escrituro la casa y ella, cuando yo ni siquiera estaba aquí, aparece con que le debo una diferencia. Y encuentra abogados porque en ese momento y después ella pertenecía al Poder Judicial. Formaba parte del Poder Judicial. Entonces para ella fue muy fácil encontrar quien le ayudara y cómo armar la trenza para quedarse con la hijuela. Hicieron un remate, en 2007, entre gallos y medianoche que nadie se enteró qué remataba".
Según la versión de Celis Morales, "ella pasa a alquilar, porque nosotros teníamos alquilado en ese momento a los juzgados laborales en la justicia. Entonces inmediatamente nosotros con nuestros abogados, que ya falleció el doctor Pringles, presentamos lo que habían hecho. Pero ¿qué pasaba? A nosotros nos decían no a lugar al abogado nuestro. ¿Por qué? Porque ella estaba en la parte del juzgado. El caso así ha ido pasando. Se han perdido los expedientes, se escondían los expedientes, pasaba el tiempo... hasta que en un momento el doctor Marcelo Navas me embarga la casa después de que se habían quedado con la hijuela, que eran los locales más las oficinas de arriba con ocho, diez inmuebles. Entonces nosotros seguimos apelando porque es un delito continuo, una sentencia que realmente fue bochornosa".
La mujer afirmó que "ahora hemos apelado a la Cámara porque en todo momento nosotros hemos dicho que un juez que se presta para semejante injusticia y desproporcionada de una deuda de 300.000 pesos, querer quedarse con locales que cuesta cada uno miles y miles de millones. Entonces nosotros eso lo hemos seguido y lo seguiremos a nivel nacional, a La Haya, donde sea".
Agregó la viuda de Koss que "vamos a seguir apelando porque todo el mundo sabe que me pertenece el edificio".
Además, los Koss dijeron haber sido amenazados. "Ellos acá han venido a prepiar a mi hijo. A mí me han pasado amenazas, nos han amenazado de muerte. Y tenemos pruebas. Yo quiero prevenir a la gente, porque no es solo a mí. Con esto de las inmobiliarias y con una escribanía que la tienen a su favor, porque también están en la trenza", destacó la mujer.
Y agregó: "Yo quiero prevenir a las personas mayores, a las personas que tienen bienes, porque se buscan estos abogaduchos, y ellos le inventan las deudas, le inventan, porque a mí me ha inventado esa mujer esa deuda, para poder quedarse, porque yo tengo escritura, y tengo todos los papeles en orden. Y ha sido ella la que he armado, aprovechando, con ayuda de dentro del juzgado. Quiero llamarle la atención, al popular, al Poder Judicial, al Poder Legislativo, que revise ¿qué pasa con el sistema?".
Por su parte, Uriel Koss aseguró que "ahora vienen a esgrimir los papeles que ellos han hecho en esa subasta privada, que ellos son los dueños de los inmuebles. Y entonces mi mamá nunca puede terminar de pagarle porque la deuda es insaciable, y encima te rematan y te quieren embargar la misma casa que te venden. O sea, es una locura. A mi mamá después de eso la llevaron a la quiebra. Está en quiebra hace cinco años y nadie le ha dado una solución".
Y destacó que "la gente que está administrando el edificio es inmobiliaria, es Nelly Lanteri de Lara y el hijo, que es Leonardo Lara. Así se presentan, con estos papeles. Después te rescinden contratos, te dan las cosas sin firma, después te ejecutan los contratos que dejan cajoneados, juntando intereses".
La causa, dijo Koss, está siendo tramitada en la Justicia Civil y en la Penal. "En la instancia Civil lo que estamos haciendo es tratando de demostrar que ha habido un ardid procesal, que ha habido un abuso de derechos, que lo que se están queriendo adjudicar ni siquiera les corresponde, de que hay una desproporción y que se tiene que respetar el derecho de propiedad", Y concluyó: "que quede en claro que la subasta forzada de derecho hereditario configura un abuso del derecho".