Durante este miércoles se espera el posible arribo de olas a la costa chilena, tras el potente sismo ocurrido a 134 kilómetros al sureste de Petropavlovsk, en la península de Kamchatka, en Rusia. El movimiento telúrico ocurrió en la tarde del martes, y desde entonces se mantiene activa una alerta de tsunami que afecta a varios puntos del Pacífico, entre ellos el territorio chileno.
En este contexto, algunos sanjuaninos que se encuentran del otro lado de la Cordillera compartieron sus sensaciones con Tiempo de San Juan: desde la calma que da el acostumbramiento hasta la incertidumbre del que está de paso.
Mario Barrios, ex defensor de Unión de Villa Krause y San Martín, vive actualmente en Santiago. Contó que si bien la alerta está activa, no hay un clima de preocupación generalizado. “Con el tema del tsunami, la alerta está activa, pero sobre todo por el lado de la Isla de Pascua. Obviamente está retirado del continente, que sería lo primero que se vería afectado, y todo el borde costero chileno también tiene alerta, pero no hay evacuaciones ni nada de eso. Están viendo qué pasa con la isla, que sería la primera escala en caso de que haya un tsunami. Pero hasta el momento está todo normal, día normal para todo el mundo”, señaló.
“Acá en Chile la gente con los temblores y tsunamis tiene que ser algo tremendamente poderoso para que entre en pánico. Yo viví el terremoto del 2010 y fue algo brutal, y aun así la gente se movía tranquila. Es costumbre. Lo paradójico es que, por ejemplo, cuando llueve fuerte, la gente se altera mucho porque no están acostumbrados. Pero los temblores no los asustan. Quienes sí la pasan mal son los extranjeros que viven acá y no están acostumbrados: venezolanos, colombianos, brasileños... ellos sí lo sufren”, agregó.
Marcos Ottenhsimer es otro sanjuanino que lleva 25 años viviendo en Santiago. En su caso, también destaca la tranquilidad con la que se vive la situación. “Solo se habla por las noticias, ya sea radio o televisión. Lo único que se dice es que sonaron las alertas y que toda la primera hilera de la costa está evacuada: departamentos, locales, negocios, etc. No porque las olas vayan a llegar tan grandes como en el norte, donde se espera una altura de 3,5 metros, sino por la cantidad de agua que va a subir. Desde hace tiempo que lugares como Reñaca tienen poca playa, apenas doce o quince metros, y seguramente el agua va a sobrepasar el pavimento”, explicó. Y resumió: “La gente, tranquila, acostumbrada 100%”.
Braian Gómez, en cambio, está en Chile por trabajo desde el fin de semana. Tenía previsto quedarse dos días, pero decidió acortar su estadía. “Yo viajo a Chile seguido. Ahora mismo estoy en Santiago. Acá están con mucha expectativa y hay muchos controles y alarmas. Llegué ayer y hay operativos de prevención. No vi evacuaciones, pero sí un poco de miedo en la gente. Yo me vuelvo hoy mismo”, dijo.
La alerta de tsunami fue activada por el Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA), junto a Senapred, que determinaron protocolos de evacuación para los sectores de mayor riesgo. Desde la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) también se confirmó la amenaza para varias zonas costeras, entre ellas Chile, coincidiendo con los informes emitidos a nivel local.
Por ahora, no se registraron emergencias ni daños, pero las autoridades continúan con un monitoreo permanente a la espera del comportamiento del mar.