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SUSCRIBITE“La Escalera” nació durante los noventa. Los vecinos transformaron una piecita de 15 metros cuadrados, que fue un aguantadero, en una biblioteca popular. Hoy es un ícono cultural de San Juan por impulsar proyectos sin antecedentes e incentivar la lectura a varias generaciones.
En una modesta habitación de 3 por 5 metros, ubicada sobre calle Agustín Gómez al sur de la plaza de Trinidad, nació hace más de 30 años una de las iniciativas culturales más entrañables de la ciudad de San Juan: la Biblioteca Popular La Escalera. Lo que en un principio fue un pequeño depósito abandonado, destinado al guardado de herramientas, se transformó en un faro de conocimiento y comunidad gracias al impulso colectivo de los vecinos.
La historia comenzó con una necevidesidad y un hartazgo. Cansados de convivir con un espacio deteriorado que se había convertido en un "aguantadero", los vecinos decidieron tomar cartas en el asunto. Así nació la idea de crear una biblioteca, una iniciativa que rápidamente prendió entre los habitantes del barrio. El nombre elegido, La Escalera, simboliza la posibilidad de ascenso personal y colectivo a través de la lectura, peldaño a peldaño.
La fundación oficial llegó el 6 de marzo de 1993. Pero para llenar de libros aquel diminuto espacio, fue necesario apelar a la creatividad. Un vecino de apellido Ávila, dueño de una heladería, propuso canjear un helado por un libro. Otro prestó su auto y un parlante para hacer difusión. Con materiales donados y varios bingos comunitarios, lograron construir las primeras estanterías y dar forma a la biblioteca.
Finalmente, el 18 de marzo de 1994, La Escalera abrió sus puertas al público con el apoyo del municipio, que cedió el espacio en comodato. La biblioteca creció rápidamente y en 2005, con fondos de la Comisión Nacional Protectora de Bibliotecas Populares, se amplió con una moderna Sala de Lectura vidriada que da a la plaza, equipada con aire acondicionado, computadora, cocina y baño.
La Escalera no solo es una biblioteca: es también un centro cultural pionero. Allí tuvo lugar la primera presentación al aire libre de la Orquesta Sinfónica de la Universidad Nacional de San Juan, y fue el punto de partida de la Feria de la Cultura, un evento con stands dedicados exclusivamente al arte y la literatura. Además, es la única biblioteca de la provincia con libros de la Armada Argentina, lo que motivó que su sala de lectura lleve el nombre “Almirante Brown”, en sintonía con el nombre de la plaza.
Actualmente, La Escalera cuenta con un centenar de socios y es consultada a diario. Más allá de los números, lo que permanece es el espíritu con el que fue concebida: una comunidad que, unida por los libros, supo transformar un problema en una oportunidad.
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