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SUSCRIBITEEn 1992, José Cortez, un joven de 19 años, fue asesinado por su propio padre en un acto de violencia familiar que marcó para siempre a su madre, Ana Pérez, quien nunca logró superar la pérdida ni perdonar al victimario.
¡Hay nuevo capítulo del podcast de Historias del Crimen! El capítulo VII trata sobre un macabro asesinato en el Barrio Pateta. En noviembre de 1992, José Cortez, un joven de 19 años, fue asesinado por su propio padre en un acto de violencia familiar que marcó para siempre a su madre, Ana Pérez, quien nunca logró superar la pérdida ni perdonar al victimario.
Sergio Cipriano Cortez, un hombre violento, machista y alcohólico, terminó con la vida del joven en medio de una discusión dentro de su casa en Chimbas, San Juan. José era el único hijo de Ana Pérez y representaba para ella todo lo bueno en su vida. El crimen se produjo cuando Ana no estaba en casa, y el joven, que esa tarde debía bautizarse en su Iglesia Evangélica, fue apuñalado por su padre tras años de maltrato familiar. Cortez intentó encubrir el hecho y luego huyó, pero fue detenido y llevado a juicio. En 1994, fue condenado a 20 años de prisión por homicidio agravado por el vínculo, aunque el tribunal consideró como atenuante su estado de ebriedad.
Ana Pérez jamás logró superar la pérdida de su hijo ni perdonar al hombre que lo mató. La tragedia marcó su vida para siempre, sumiéndola en la depresión y el dolor. Años después, buscó a Cortez en la cárcel para exigirle una explicación, pero solo recibió un “perdoname” sin justificación. Ana, firme en su rechazo, le respondió que solo Dios podía perdonarlo. Sergio Cortez murió en prisión en 2001, solo y atormentado por el remordimiento, mientras Ana sigue siguió recordando a su hijo como el mejor regalo que la vida le dio y cuya ausencia nunca logró aceptar.
Cabe destacar que dicha producción es una incursión de Tiempo de San Juan en esta famosa plataforma. Cada semana se emitirá un nuevo capítulo.
El contenido está a cargo de Walter Vilca, la producción de David Cortez Vega, el relato de Fernando Ortiz y la edición de Lucas Colella.