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SUSCRIBITE Un violento robo se produjo el martes por la noche en una vivienda de Chimbas, en El Mogote, donde tres delincuentes armados encañonaron a dos madres y sus hijos y les hicieron vivir 20 minutos de terror. Pese al corto tiempo, para las víctimas duró una eternidad y fue una pesadilla que temen que se repita, por lo que piden seguridad en la zona con urgencia.
Pamela y Micaela Sánchez son hermanas y hace dos días se convirtieron en rehenes de criminales que, a punta de pistola, las amenazaron con matar a sus niños, las agredieron y les llevaron dinero en efectivo y pertenencias de valor. "Estaban encapuchados, nos golpearon, nos pedían plata. Me decían 'cómo no vas a tener, si tenés mansa casa'", detalló la mujer que sufrió golpes en el rostro que le dejaron marca.
Acorde contó la dueña de casa, los malvivientes ingresaron por el fondo de la vivienda que linda con un zanjón de Hidráulica en desuso y las sorprendieron en el interior. "Nos estuvieron mirando, antes habíamos estado en el fondo con los niños y cuando nos metimos por el viento, al rato aparecieron", sostuvo Pamela.
Los ladrones que escaparon con 30 mil pesos entraron, luego de romper el alambrado que rodea el perímetro de la propiedad, y obligaron a las mujeres a cerrar las cortinas para que ningún vecino se alertara sobre la situación. Al mismo tiempo, las insultaban y les exigían dinero en efectivo.
"Nos encerraron en el lavadero y, como los niños salían a ver lo que pasaba, nosotras los agarrábamos y por eso nos pegaron. No nos resistíamos, pero queríamos cuidar a los niños. Nos tiraron al piso, nos decían que nos iban a matar, le apuntaban con las armas a nuestros hijos", recordó la damnificada que aseguró que no hay seguridad en la zona.
Al respecto, Pamela se mostró preocupada porque contó que los robos en las inmediaciones son constantes y nadie hace nada para evitarlos. "El zanjón es un pasaje a otras calles, es una vía de escape y, como es una zona despoblada, las pocas casas que hay son el blanco. A mi vecina le robaron todo hace unos meses, le desvalijaron la casa, el esfuerzo de toda su vida y ahora me tocó a mí", expresó.
Con el miedo de que vuelva a ocurrir, la mujer que sufrió la violencia de los malvivientes indicó que nadie le garantiza que le suceda otra vez. "Teníamos la Unidad del Mogote 1 con camionetas, motos, pero duró 6 meses. Luego, le fueron sacando vehículos y quedaron sólo dos motos para todo El Mogote, que es grande", señaló y agregó: "Después se instaló la Unidad del Mogote 2, pero les pasó lo mismo y además se ocupan de otra zona. Entendemos que estamos desprotegidos y alguien tiene que hacer algo".
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