Durante la primera semana de diciembre, en Zonda, inspectores de Medio Ambiente y un funcionario de esa repartición fueron agredidos por tres cazadores furtivos que les dispararon y huyeron. Afortunadamente, la bala que salió de un rifle calibre 22 no alcanzó herir a ninguno pero, tras una intensa búsqueda, la policía dio con el paradero de dos atacantes que fueron reconocidos por el baqueano de la zona que acompañaba a los trabajadores del área protegida.
Luego de sufrir el ataque, los damnificados -entre ellos el director de Conservación de Áreas Protegidas, Dardo Recabarren- radicaron la denuncia en la Comisaría 14º con jurisdicción en el lugar del hecho, La Ciénaga. Por ese motivo, personal de dicha dependencia policial llevó adelante allanamientos para dar con los sujetos identificados como Emanuel Rojas y Ángel Paredes, conocidos en el ambiente delictivo departamental y sindicados como los autores por el lugareño que también vivió momentos de tensión en el medio de la montaña.
Tras la detención de los acusados de abrir fuego y luego de permanecer algunos días en los calabozos de la seccional zondina, Rojas -sindicado como el autor del disparo- y su cómplice fueron liberados por directivas del juez correccional interviniente, aunque continúan vinculados a la causa por uso de armas de fuego ilegal y amenazas.
"Tenían rifles calibre 22, estaban muy sacados y nos amenazaban de muerte. Uno de ellos, de apellido Rojas fue el que me disparó. Por fortuna no me hirió pero sí me asusté bastante", detalló el funcionario a Tiempo de San Juan.