Una juntada con amigos que no terminó nada bien tuvo sede en un domicilio de La Rinconada, Pocito. Todo arrancó con un asado entre amigos: dos jóvenes fueron a visitar a un anciano con una discapacidad motriz. Sin piedad, las visitas le robaron la billetera y el celular al dueño de casa, que los denunció y cayeron presos.
La víctima se encontraba en su domicilio cuando al mediodía recibió la visita de un conocido suyo, Martín Rojo, quién iba acompañado de un amigo, Jorge Irrazabal. La charla iba bien y decidieron comer un asado.
Así, los tres sujetos pasaron todo el día en la vivienda, compartiendo el almuerzo y tomando unos tragos. A las 18:30, la víctima buscó su billetera para pagar su parte del asado y se percató que no estaba su dinero: aproximadamente $1.700, y que también le faltaba su teléfono celular. Por esta razón, el hombre increpó a sus visitantes, quienes comenzaron a discutir entre ellos y tiraron el teléfono de la víctima al suelo y se fueron del domicilio.
Inmediatamente, el damnificado llamó por teléfono a la seccional 7º y denunció el hecho, brindando las características físicas de los delincuentes, quienes fueron aprehendidos a los pocos metros por personal policial de la Unidad Operativa La Rinconada, dando inicio al procedimiento especial de flagrancia.
Trabajaron en el procedimiento el cabo Gomez, el agente Enrique, el cabo Julio Ricardo, a cargo del principal Mario Aguilera y en el comando Sur a cargo de cabo Jesús Paez y del agente Luis Gelves, a cargo del comisario Víctor Mondaca y el principal Sergio Montaña.