Tras la Cámara Gesell a la que fue sometida la menor, el juez que investiga el caso del preceptor denunciado por gooming que generó un escándalo en la provincia resolvió concederle el beneficio de la eximición de prisión al auxiliar docente acusado de pederasta.
De esta manera y por decisión del magistrado del Primer Juzgado de Instrucción, Jorge Cruceño recibió la eximición de prisión bajo caución juratoria luego de que la abogada defensora, Filomena Noriega, lo solicitara. Previamente, el fiscal que entiende en la causa, Daniel Galvani, había requerido la detención del auxiliar docente implicado en el escándalo sexual.
Cruceño fue acusado penalmente después de que la madre de una alumna descubriera los mensajes que intercambiaba con su hija con un alto contenido sexual.
La primera medida judicial que se tomó, además de la declaración a modo de testimonio de la niña de 15 años, fue la restricción de acercamiento tanto física como virtualmente. Desde lo tecnológico, el preceptor no puede tener ningún tipo de contacto vía redes sociales o telefónicamente y, desde lo real, debe mantener una distancia de 200 metros como mínimo.
En principio los abogados de las partes, tanto de la defensa como de la querella, habían señalado que el delito contemplado en el artículo 131 del Código Penal es excarcelable. No obstante, la solicitud del fiscal había encendido las alarmas.