Este miércoles hubo una nueva marcha de los familiares de Shariht Carrizo, el pequeño de 3 años, que perdió la vida producto de las heridas que le produjo un accidente de tránsito en Pocito. Además de la investigación llevada a cabo con respecto al accidente, la UFI N°5 paralelamente analiza el actuar que tuvo el Hospital Rawson con respecto al menor.
La familia de Shariht en el último tiempo se ha manifestado por el actuar que tuvo el Hospital Rawson, su opinión es que fue negligente. Y en las últimas horas, la familia con su abogado representante -Gustavo de la Fuente- se presentaron formalmente ante la Justicia.
Peritos de la corte y de la UFI estudiarán la historia clínica secuestrada y determinarán si hubo mala praxis o no.
La UFI N°5 de Delitos Especiales a cargo de Francisco Pizarro y sus ayudantes fiscales, Ignacio Domínguez y Mariano Carrera tomaron cartas en el asunto sobre este asunto y el viernes último, con oficio en mano, secuestraron documentación sobre Shariht. Pero algo raro ocurrió, porque el nosocomio no entregó toda la documentación, sino que le dieron la de terapia intensiva.
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Ante esta situación, la UFI con orden del juez Alberto Caballero se allanó el Hospital Rawson este martes y secuestraron la otra parte de la historia clínica, precisamente la del área urgencias.
Para la familia de Shariht hay algo raro con esta situación y dicen que el nosocomio ocultó información y por tal razón no dio toda la documentación el primer día. Su entorno habla que se hizo un segundo allanamiento para buscar otra parte de la documentación, precisamente unos análisis. Es decir que la justicia habría acudido en tres ocasiones al hospital para secuestrar la totalidad de la documentación.
No hay profesionales del hospital señalados
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Para la familia de Shariht está más que comprobado que hubo mala praxis por parte de los profesionales. El enojo de ellos es que al menor le dieron el alta el día que ocurrió el accidente de tránsito y tuvieron que volver a ir en la noche porque el niño estaba mal. El pequeño tenía una fractura de cráneo. Pero eso no es todo, cuando el niño falleció a los cinco días, supuestamente los médicos querían extenderle el certificado de defunción a la familia porque el niño había fallecido por meningitis.
En ese momento actuó la Justicia y la fiscalía realizó la autopsia correspondiente confirmando que el niño falleció producto de la herida del accidente de tránsito, informando también que el niño atravesaba un cuadro de meningitis.