Un hecho confuso terminó con una mujer de sólo 25 años con quemaduras muy graves en el cuerpo, algunas de segundo y otras de hasta tercer grado. La joven, identificada como Marcela Márquez, quedó internada en el Hospital Marcial Quiroga, en la unidad del quemado debido a las heridas que sufrió.
En la causa hay más sombras que certezas, porque mientras todo parece indicar que hubo una discusión antes de que Márquez resultara quemada, cuando la Policía llegó al lugar la joven, desde la ambulancia, aseguró que había sido ella misma quien se roció con alcohol y se prendió fuego. Todo ocurrió en una vivienda ubicada en Calle Rastreador Calívar y Sembrador, en la Villa Obrera.
La joven se encontraba con su pareja, Luis Núñez de 30 años, cuando ocurrió todo. Incluso fue el padre del hombre quien llamó a la Policía para alertar que se encontraban discutiendo, justo antes de que Márquez terminara con buena parte del cuerpo quemada.
En la Policía hay dudas sobre lo que sucedió y seguirán investigando, a pesar de las declaraciones de la mujer que insistió en que las heridas habían sido autoinflingidas. Debido a que no hay una denuncia forma, Núñez no fue detenido tras lo que sucedió.
Otro hecho de violencia, a menos de 500 metros
La Villa Obrera vivió una madrugada del sábado al domingo turbulenta. Es que además de la joven quemada, la Policía recibió otra denuncia, esta vez de una pelea que terminó en agresión, a pocas cuadras del otro hecho.
En este caso, según consta en la denuncia, fue una mujer quien rompió la cuarentena para ir a la casa de su pareja y todo terminó en gritos y cosas golpes. Si bien el hecho se encuentra siendo investigado, la investigación parece indicar que Romina Gisel Pérez fue hasta la casa de su pareja, David Ernesto Guevara, y tras cruzar algunos insultos terminó tirándole objetos que encontró a mano. Ella terminó detenida, a disposición de Flagrancia.