Marcos Arancibia recibió un disparo a quemarropa, por parte de un menor de edad en 2016, en Rawson. La víctima esperaba el colectivo con su novia Romina Castro y dos motochorros -el menor que tenía el arma- se le abalanzó para robarle, ambos forcejearon y le disparó a quemarropa.
Arancibia murió en el acto y el atacante rápidamente quedó detenido, estuvo en el Instituto Nazario Benavidez por un año y desde 2017 estuvo libre; pero este miércoles recibió la condena del juicio que se hacía en su contra y la jueza María Julia Camus, del Juzgado de Menores, condenó a Luciano Gómez a 15 años de prisión efectiva.
Los alegatos de este juicio se hicieron este mismo día, la fiscal pidió la condena de 22 años de prisión, mientras que la defensa pidió la absolución; y la magistrada lo encontró culpable de: homicidio ‘criminis causae’ y robo agravado por el uso de arma de fuego.
El sujeto apenas recibió la condena, por orden de la jueza quedó detenido en el juzgado y enviado directamente al Penal de Chimbas para empezar a cumplir su condena.
El hecho ocurrió en febrero de 2016 y la investigación para dar con el atacante estuvo a cargo de la División Homicidios de la Central de Policía.
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