Nancy Muñoz es la encargada de lavar los conjuntos de camisetas después de cada partido, un trabajo que hace sin pedir nada a cambio y sólo por amor al Cacique, con el que fortaleció vínculos tras la muerte de su marido, quien era un fiel colaborador. Es por eso que, en cada entrega, no sólo asiste al equipo, sino que honra su memoria.