Por qué robaron sólo las computadoras y un muñeco. Cómo es que sabían que en esa casa no había nadie. Qué hacía los dos vigiladores, que no vieron lo que sucedía dentro del barrio privado. Y por qué aún no realizaron la denuncia formal.
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SUSCRIBITEPor qué robaron sólo las computadoras y un muñeco. Cómo es que sabían que en esa casa no había nadie. Qué hacía los dos vigiladores, que no vieron lo que sucedía dentro del barrio privado. Y por qué aún no realizaron la denuncia formal.
Éstas y otras preguntas rondan en torno al misterioso robo en la casa del fiscal federal Francisco Maldonado, quien impulsó los juicios contra militares represores en San Juan y conocidos narcos de Cuyo. Todo es hermetismo. TIEMPO DE SAN JUAN intentó contactar al funcionario judicial durante todo este martes, pero no contestó los llamados ni los mensajes. En la Policía de San Juan tampoco se pronunciaron sobre el caso ante el desconcierto.
El juez Guillermo Adárvez, del Tercer Juzgado de Instrucción, y los policías de la Comisaría 13ra de Rivadavia iniciaron de oficio el lunes último la investigación por el ataque y robo en el interior del Barrio Privado Las Marías, en la calle Meglioli, Rivadavia. Desde el sábado que no había nadie en esa vivienda, dado que el fiscal se encuentra fuera de la provincia, explicaron fuentes del caso.
La empleada doméstica llegó el lunes en la mañana y se encontró con el desorden en el primer piso. Después se hizo presente el hijo, que vive allí pero que tampoco estuvo durante el fin de semana, quien llamó a la Policía. Fue el muchacho el que informó a la Policía que robaron dos notebooks y un muñeco de colección, comentó un alto funcionario.
Cuando supieron quién era el dueño de casa, se abrieron los interrogantes. No se trata de cualquier funcionario judicial. El fiscal federal Maldonado fue el que logró las condenas, en 2011, de la pareja sanjuanina que se apropió de un niño durante la última dictadura militar en Argentina.
También intervino en la llamada Megacausa II, que en 2018 terminó con las condenas de 13 militares por secuestros, torturas, robos y asesinatos de decenas de sanjuaninos. Hizo que condenaran e inhabilitaran al exjuez provincial Juan Carlos Caballero Vidal por su inacción ante el secuestro y las torturas de dos detenidos. Además, actuó en importantes causas penales contra conocidos narcotraficantes en la zona de Cuyo.
Por eso no se puede descartar que el hecho en su casa sea un atentado o un mensaje intimidatorio contra el fiscal, aunque algunos afirman que fue un robo común. Pero todo es muy sospechoso. El barrio es cerrado y cuenta con una garita en el ingreso, cámaras de seguridad y dos vigiladores de la empresa El Guardián las 24 horas, explicó una fuente del caso. Sin embargo, no notaron nada raro.
Otro punto es cómo sabían que allí no había nadie. ¿Acaso manejaban información? Los delincuentes supuestamente entraron por el fondo de la casa y accedieron al primer piso por una ventana corrediza. En teoría no forzaron nada, según las primeras versiones. Ahora, lo insólito fue que, teniendo toda la casa a su disposición, sólo se haya llevado dos notebooks y un muñeco de colección. Se supone que hay otras cosas valiosas en una vivienda de este tipo, pero no tocaron otras cosas. La intriga es si los desconocidos buscaban información clasificada y por esa razón sustrajeron únicamente las computadoras.
Es extraño que ladrones comunes no robaran más artefactos electrónicos, ropa o joyas. De ahí que se barajen teorías de un posible mensaje mafioso o una intimidación. A esto se suma el hermetismo de la familia. Por ejemplo, todavía no radicaron la denuncia formal en la Policía. Su hijo habría dicho que la harán cuando el fiscal llegue de viaje.
El robo es extraño, pero también misterioso, por el posible por el trasfondo y el silencio del fiscal y de la fuerza provincial. Ni siquiera trascendió si reforzaron la seguridad en la casa del funcionario judicial.
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