Marío Díaz Terrado denunció el pasado 18 de octubre que la empresa Travel Rock se negaba a pagar la cirugía de su hijo, quien se había quebrado durante un viaje de estudios en Bariloche. Debido a esto el hombre había intimado a la empresa a través de una carta documento y además hizo pública la situación.
Luego de esto, Terrado explicó a través de una carta pública aseguró que la empresa había enmendado la situación y se hizo cargo de la cirugía del menor. El hombre explicó que el adolescente de 17 años "se encuentra en recuperación en mi hogar” y que la empresa "finalmente se hizo cargo de los costos de la operación de mi hijo, quedando comprometida a abonar todos los gastos hasta la recuperación total de la mano del niño”.
Mirá la carta completa que hizo pública el hombre:
Con gran alegría quiero comunicar que en la tarde del día 21/10/2016 finalmente fue operado mi hijo de la mano derecha, en el Instituto de Traumatología de San Juan. La operación fue exitosa, dos clavijas fueron insertadas en su mano y hoy mi niño se encuentra en recuperación en mi hogar. Luego de haber recurrido a los medios de comunicación denunciando el hecho, de haber enviado intimación mediante carta documento y de interminables comunicaciones, la empresa TRAVEL ROCK S.A. finalmente se hizo cargo de los costos de la operación de mi hijo, quedando comprometida a abonar todos los gastos hasta la recuperación total de la mano del niño (lo que espero que cumplan sin excusas y sin dar vueltas), y yo me comprometí a comunicar esta situación a los medios de comunicación de la Provincia.
Quisiera agradecer profundamente la inmensa solidaridad de los periodistas de los diferentes medios de comunicación de la Provincia, la deferencia que tuvieron hacia mi familia al permitirme visibilizar la situación que estaba padeciendo y poner en evidencia el accionar irresponsable de una empresa de viajes que, en su momento, dejó librado a su suerte a mi hijo de 17 años poniendo seriamente en peligro la funcionalidad de su mano derecha y su salud en general. Sin la ayuda y visibilización de esta situación por parte de los periodistas sanjuaninos, este resultado final no se habría conseguido y probablemente mi hijo hubiera perdido la movilidad y funcionalidad de su mano, con las consecuencias que en su futuro laboral esto hubiese traído aparejado.
Celebro la actitud de TRAVEL ROCK de finalmente asumir su responsabilidad empresaria y haber podido intervenir quirúrgicamente a mi hijo y así salvarle la mano. Espero que en un futuro no haga falta recurrir ni a los medios de comunicación ni a intimaciones legales para que las empresas que llevan de viaje de egresados a nuestros niños asuman las curaciones de los mismos ante cualquier evento de salud que sucediere. Se trata de "personas”, no de "cosas”, y se trata de "Responsabilidad Social Empresaria”, además del cumplimiento correcto de las obligaciones particularmente frente a una emergencia de salud.
Quisiera agradecer la solidaridad de la ciudadanía sanjuanina, expresada en una "sensación pública” favorable a resolver positivamente el tema lo que finalmente ocurrió.
Quisiera destacar y profundamente agradecer el accionar de algunas personas en particular: La receptividad de los Dres. González Testi y Pablo Flores, quienes a través de amigos en común ofrecieron su ayuda para lo que fuera necesario y confirmaron su disposición a ayudar en caso de ser necesario en comunicación personal por vía telefónica. La funcionaria del Ministerio de Desarrollo Humano Sra. María Eugenia Putelli y el Dr. Javier Rodríguez, quienes apenas enterados del tema por los medios de comunicación se pusieron en contacto con mi persona para ponerse a disposición a los fines de solucionar la situación que estaba padeciendo. El acompañamiento decisivo del periodista Juan Pereyra, trabajador de los medios de comunicación, por su firme convicción de que la causa que este Papá llevaba adelante era justa y conectarme con el resto de sus colegas para la difusión de la situación que padecía. Y al Dr. Juan Pablo Ocampo, amigo personal y medico interviniente en la cirugía, por su acompañamiento, asesoramiento y comprensión desde el principio hasta el final que permitió, finalmente, salvarle la mano a mi hijo.
Nobleza obliga, quisiera pedirles compañeros trabajadores de prensa, que difundan la grata noticia de que finalmente la empresa de turismo asumió la responsabilidad que le correspondía y que mi hijo pudo salvar su mano.
Y compartir con ustedes la felicidad que, como padre, esta noticia me genera.
Con gran afecto.
Mario Díaz Terrado y Familia