Apenas 24 horas después de que los concejales de Angaco, por unanimidad, decidieran suspender en sus funciones al intendente José Castro, la Justicia le dio la razón al jefe comunal en una medida de amparo que presentó y lo restituyó en el cargo. El concejal José Risueño que fue quien motorizó la denuncia, dijo que la restitución no está firme porque él espera apelar la resolución judicial y que no han sido notificados de la medida por lo que por lo menos hasta el lunes conservarán los concejales las llaves del Ejecutivo. Hoy los concejales denunciaron en la Justicia a Castro por el supuesto uso irregular de máquinas y obreros municipales, en un predio privado en Chimbas.
Risueño se quejó de la Justicia y dijo que la medida era de esperar pero que esperaban que se resuelva en unos 5 días, no tan pronto. “El camino era el correcto, ahora si la Justicia no lo entiende así y se demora en denuncias como la del combustible y para colmo que se pierden dos años, igual con la del secadero que no pasó absolutamente nada, entonces los concejales tendríamos que cerrar el Concejo porque vemos que no hay forma de controlarlo al intendente si la Justicia actúa de esa forma”.
Desde que se dictó la medida poco se pudo hacer con los arqueos financieros y controles a los libros que eran meta de la suspensión. Según Risueño, la presidenta del Concejo Valeria Garay recibió las llaves pero hoy sólo pudo tener reuniones con funcionarios y el municipio estuvo cerrado en lo administrativo porque era asueto por el día del empleado municipal. El lunes, convocaron al Tribunal de Cuentas para que les ayude a descifrar los manejos de Castro y eso se mantiene en pie.
Como no fueron notificados aún este viernes, Risueño dijo que esperarán ver los pasos a seguir con la asesora letrada del Concejo pero que él personalmente se inclina por apelar la decisión de la restitución.