La ex mandataria fue citada por el juez federal Julián Ercolini, quien investiga el supuesto diseño de un esquema de "beneficios exclusivos" a favor del grupo Austral, propiedad del empresario Lázaro Báez, actualmente detenido por otra causa, por presunto lavado de dinero, en detrimento de las arcas del Estado.
Los fiscales del caso, Gerardo Pollicita e Ignacio Mahiques, la acusan de un presunto delito de "administración infiel" y de negociaciones incompatibles con la función pública.
El pasado 21 de octubre, los fiscales remitieron su último dictamen con nuevas pruebas para ampliar la acusación contra la ex presidenta, que este domingo se defendió desde su cuenta de Twitter:
"La obra pública en nuestro gobierno tuvo una distribución horizontal. Estos son los principales contratistas. Auditemos todo", se defendió este domingo la Cristina Kirchner en Twitter, donde publicó una lista de las adjudicaciones durante su mandato y abogó por revisar el conjunto de las licitaciones y no solo las del sur del país, donde el grupo Austral tiene mayor protagonismo.
Cristina estaba llamada a declarar el pasado 20 de octubre pero, tras una petición interpuesta por la defensa por el inminente nacimiento de la tercera nieta de la expresidenta, Ercolini resolvió postergar la citación hasta el 31.
La defensa había pedido también anular la indagatoria por considerar que se trataba de una investigación incipiente y que las pruebas de la causa sostienen conclusiones contrarias a las acusaciones de la Fiscalía.
El abogado Carlos Alberto Beraldi, representante de la ex mandataria para este expediente, alegó incluso que hay una "clara intencionalidad política" en la causa.
Durante noviembre está previsto que se presenten para declarar ante Ercolini altos cargos del pasado gobierno, el exministro de Planificación Julio de Vido y los empresarios relacionados con el caso, incluido el propio Báez.
(Fuente:Minuto Uno)