José Antonio "Pico" Peralta, considerado el líder de "Los 30", una de las bandas de narcomenudeo más fuertes que opera en el sur de la capital tucumana, acusado de liderar una de las principales bandas de narcomenudeo, logró fugarse en la noche del jueves cuando allegados al detenido sorprendieron al personal que cumplía guardia en la comisaría de Delfín Gallo, donde estaba alojado desde hace menos de un mes, y lo ayudaron a escaparse en un vehículo que es buscado por fuerzas de seguridad provincial y nacional.
Pico, había sido detenido el 8 de agosto pero se escapó un mes después de la comisaría de Delfín Gallo, donde estaba alojado por orden de la Justicia Federal. Dijo sentirse mal y sus compañeros de celda -en el lugar había otros ocho detenidos por distintas causas- pidieron la ayuda de uno de los policías porque supuestamente estaba sufriendo un ataque de epilepsia.
El carcelero le abrió la puerta y lo llevó hasta el baño para que se mojara la cara sin saber que ese era el primer paso del golpe comando que habían organizado para facilitar su huida.
Mientras ello ocurría, en la puerta de la comisaría se estacionó un VW Gol gris y descendieron dos hombres portando pistolas y armas largas que ingresaron a la sede policial, donde redujeron a los otros dos uniformados que se encontraban en ese momento.
Luego accedieron a la zona donde está el calabozo y se unieron a Paralta, que estaba luchando con el carcelero, al que también redujeron y golpearon salvajemente provocándole heridas que obligaron su trasladado hasta un centro asistencial de la zona para ser atendido.
Peralta y los otros dos sujetos salieron corriendo de la comisaría, se subieron al vehículo que estaba estacionado en la puerta y escaparon.
Los otros ocho detenidos, pese a que tenían la posibilidad de escapar, decidieron quedarse en el lugar, según indicó la agencia Télam.
(Fuente: MInuto Uno)
