El animal que fue arrojado desde un helicóptero a la piscina de la casa del empresario textil Federico Álvarez Castillo en José Ignacio (Uruguay) tuvo un final que podría parecer predecible, ya que terminó siendo asado a la parrilla por el dueño de la vivienda.
Así lo confirmó Ana Carolina Dean, la fiscal del caso, quien dialogó con el diario El País y brindó detalles respecto de la declaración del dueño de Etiqueta Negra. "Estaba en su casa, con su familia, escucha el estruendo y cuando sale vio que era un cerdo en su piscina. Lo retiraron, lo asaron y lo comieron".
Mientras aún aguarda por la identificación del piloto del helicóptero, la fiscal de Maldonado deslizó una hipótesis de lo sucedido. "Todo indica que fue una broma. Nadie está esperando que llueva un animal del cielo, y esto fue filmado y se escuchan risas en el video", sostuvo.
Tanto Álvarez Castillo como su pareja, la exmodelo Lara Bernasconi, intentaron despegarse del incidente y se consideraron "víctimas" a pesar de que en el video se escuchan risas. Lo mismo hizo la marca dirigida por el empresario y la firma Paula Cahen D'Anvers, firma que supo crear el protagonista del particular episodio.