El diputado opositor venezolano Juan Andrés Mejía denunció esta tarde que en la jornada de este sábado se registraron cuatro muertos y al menos 20 heridos de bala, en la represión en los pasos de frontera las fuerzas policiales y militares de Venezuela que impiden el paso de camiones con ayuda humanitaria.
"Han generado también violencia en el punto fronterizo con Brasil, hemos visto la peor cara de este régimen asesino, en Santa Elena de Uairén hay una masacre, cuatro muertos y más de veinte heridos de bala" afirmó el legislador antichavista en su cuenta de Twitter.
Sobre el mismo hecho, Alfredo Romero y Gonzalo Himiob, directores del Foro Penal, elevaron la cifra de heridos a 29 personas. "Hay una situación extremadamente crítica en Santa Elena de Uairén, 29 personas han sido heridas de bala, han sido ingresados al hospital de Santa Elena de Uairén y cuatro han sido asesinados", indicó Romero en un video publicado en Twitter.
Los incidentes comenzaron este sábado por la mañana cuando miembros de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) lanzaron granadas de gas lacrimógeno contra un grupo de manifestantes. Uno de los escenarios de los enfrentamientos fue el puente Francisco de Paula Santander, que comunica al estado venezolano de Táchira con el colombiano Norte de Santander.
La movilización fue convocada por Juan Guaidó, quien se juramentó como presidente interino del país por encargo de la Asamblea nacional (AN, Parlamento), para aumentar la presión sobre los militares y alcanzar su objetivo de hacer ingresar toneladas de medicinas y alimentos enviadas desde países que lo reconocen como autoridad venezolana.
Si bien la mayor concentración fue reportada en La Carlota, se informó de marchas en torno a otros cuarteles militares del país. La agencia EFE informó que de estas movilizaciones participan "decenas de miles de personas".
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ordenó este viernes por la noche el cierre de tres pasos fronterizos con Colombia para impedir el ingreso de ayuda humanitaria enviada por Estados Unidos y otros países que le consideran un "usurpador"