Los vecinos de la ciudad marroquí de Fez se escandalizaron cuando descubrieron que el imán de la mezquita Omar ibn Jattab estaba manteniendo relaciones sexuales con su amante en el sagrado edificio.
A pesar de que todo apunte a que se trató de una simple casualidad, fue uno de los empleados de la mezquita quien lo preparó todo para que su jefe fuese agarrado en pleno acto. El artífice de la emboscada, abandonado por su novia y sintiéndose despechado, la siguió hasta que descubrió que estaba manteniendo relaciones con el imán de la mezquita donde trabajaba, es decir, con su propio jefe.
El trabajador esperó a que ambos se encontraran en plena acción dentro de la sala de rezos de la mezquita para irrumpir en el templo con un grupo de vecinos, que se escandalizó ante lo que estaba ocurriendo.
Primero, sacaron a la mujer de la mezquita entre escupitajos e insultos para recriminar después al imán su acción mientras grababan todo con sus teléfonos. Llamaron a la policía, que detuvo a ambos por mantener una relación extra matrimonial, hecho que actualmente está penado por ley.
(Fuente: Crónica)
