La proporción de personas preocupadas por la corrupción entre los 1.350 millones de chinos ha aumentado a más del doble, a la par que surgen también otros temas complejos como la desigualdad social y la contaminación medioambiental, según un estudio publicado hoy por el Pew Research Centre.
El 84 por ciento de las 3.649 personas entrevistadas por el centro, con sede en Estados Unidos, considera que los funcionarios corruptos son un problema "bastante grande o muy grande", frente al 39 por ciento de un anterior estudio de 2008.
Los ciudadanos también se manifiestan preocupados por los efectos sobre el medio ambiente del rápido crecimiento chino. Un 35 por ciento dijo que la contaminación del aire es un problema "muy grande" y un 34 por ciento opinó lo mismo de la polución del agua. A su vez, la preocupación por la seguridad de los alimentos se ha casi triplicado desde 2008.
Los ciudadanos expresan impresiones encontradas sobre el crecimiento económico del país. La mayoría dice que le gusta el ritmo de la vida moderna, pero tres de cada 10 considera que la brecha entre ricos y pobres es un problema.
Con todo, un 77 por ciento de los chinos considera que la vida de su familia es mejor hoy que hace cinco años.
Fuente: Dpa.