El papa Francisco aterrizó este sábado en La Habana, primera etapa del décimo viaje internacional de su pontificado y con el que visitará Cuba y Estados Unidos, dos países en pleno proceso de deshielo en sus relaciones bilaterales.
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SUSCRIBITEEl papa Francisco aterrizó este sábado en La Habana, primera etapa del décimo viaje internacional de su pontificado y con el que visitará Cuba y Estados Unidos, dos países en pleno proceso de deshielo en sus relaciones bilaterales.
Francisco despegó desde el aeropuerto romano de Fiumicino a bordo de un Airbus A330-200 de la compañía Alitalia a las 10.34 locales (8.34 GMT) y aterrizó en la capital cubana en torno a las 16.00 locales (20.00 GMT), tras recorrer más de 8.600 kilómetros.
Al descender por las escaleras del avión, fue recibido por el presidente cubano Raúl Castro y por el cardenal Jaime Ortega. A continuación unos niños le entregaron un ramo de flores y el papa dialogó brevemente con ellos, mientras cientos de cubanos lo vitoreaban desde las terrazas del aeropuerto. "Cristo vive, Cristo vive", coreaba la muchedumbre.
Luego la banda tocó "La Bayamesa", el himno nacional de Cuba, mientras se disparaba una salva en honor a Francisco, el tercer papa que visita la isla.
"Quisiera pedirle a usted, señor presidente, que transmita mi saludo, admiración y respeto a su hermano Fidel", expresó el papa Francisco en su discurso durante la ceremonia de bienvenida. "Hoy renovamos estos lazos de cooperación y amistad para que la Iglesia siga alentando a los cubanos en su esperanza", afirmó.
Francisco concluyó sus palabras en la ceremonia de bienvenida con un emotivo mensaje: "El mundo necesita reconciliación, en esta atmósfera de tercera guerra mundial por etapas que estamos viviendo".
Minutos antes, el presidente cubano, Raúl Castro, habìa recibido al Papa con unas breves palabras leídas en el Aeropuerto José Martí. Allí se refirió al encuentro que ambos mantuvieron en mayo pasado en el vaticano, en el que debatieron "sobre los aspectos más importantes del mundo en el que vivimos".
"En nombre de este pueblo, le doy la más calurosa bienvenida", dijo el cubano al finalizar la lectura del documento con el que recibió al pontífice, mientras un grupo de jóvenes allí presentes coreaban: "Esta es la juventud del Papa".
Durante su discurso, Castro destacó el reiterado mensaje de Francisco contra las causas estructurales de la pobreza y la desigualdad: "Para consagrar esos derechos se hizo la Revolución Cubana", replicó el mandatario.
Más tarde, agradeció al Pontífice sus gestiones en el proceso de deshielo diplomático entre Estados Unidos y Cuba, suspendidas desde 1961. "Hemos agradecido su apoyo al diálogo entre EEUU y Cuba". Y agregó: "El bloqueo, que provoca daños humanos y provocaciones, es cruel, inmoral e ilegal, y debe cesar". (Infobae)
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