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Energía: actitud que se concreta con otros

La tercera entrega del coach de vida Carlos Gil sobre la chispa y la energía que nos motiva y pone en movimiento. Mirá cómo hacer crecer esta parte de vos.

Por Redacción Tiempo de San Juan

La energía, alta o baja, con que tiño mi actitud, es necesariamente manifestada y calificada en mis rasgos extrovertidos, esto es, en mi relación con los otros. También podré yo calificarme si me siento energizado o no en relación a mi interior como persona y manifestarlo al ejecutar por ejemplo una tarea  solitaria, pero la categorización que yo mismo reconozca, en mi relación con los demás es lo que me conducirá a mi deseo y mi accionar respecto a influir o no en la generación de esa energía.

En anteriores entregas paseamos por puntos de vista distintos a los que ya dominamos respecto a sentirnos más energizado o no y de ellos se deriva una necesaria conclusión: son innumerables y no podrían agotarse en un listado  todos los aspectos a contemplar. Seleccionamos necesariamente un criterio para poner fin a esa enunciación. Aquí, al concluir esta serie mencionamos un par de aspectos muy necesarios de ser tenidos en cuenta, sobre todo en la relación con otros, además de los ya mencionados.

Nuestro entorno tiene una influencia clara y definida. Los demás, en su contacto cercano permanente o circunstancial, me afectan en uno u otro sentido. Me siento energizado positiva o negativamente al estar con personas o grupos que alimenten o sustraigan esa energía. Será muy útil entonces reconocer cómo categorizo a quienes ya conozco o con quienes estoy destinado a contemporizar o a influir. Puede llegar a decirse que ese entorno es causa y consecuencia de mi actitud y por eso me obligo a conocerlo. Primero habré de preguntarme quienes constituyen mi entorno, sumando así a los que compartimos en casa, en nuestro  trabajo, además de los círculos de amigos o colegas. Y luego debería preguntarme sobre cada uno cuánto aportan o me sustraen de mi energía, para actuar en consecuencia de lo que yo busco o necesito. Extenderé mis interacciones con los que convienen a mis deseos y en los casos en que colisionen con mi búsqueda no será sólo el evitarlos la solución, sino que podré estimularlos a lograr mi esperada vibración brindándoles mucho afecto o compartiendo momentos vivificantes.

En igual sentido atenderemos nuestras virtudes, gestos y valores que pudieran ser detectados e impacten sobre los demás. Sonreír en forma permanente o con facilidad, ser fundamentalmente honesto al expresarme, acostumbrar en mis comentarios a ver el vaso medio lleno antes que a subrayar aspectos negativos, harán de mí una persona positiva, buscada como tal y a su vez receptora de aún más positividad. Estaré alimentando ese círculo virtuoso siempre que sea lo que yo busco, necesito y quiero.

El haber marcado lo inagotable de la lista si pretendiéramos enumerar todos los chispazos posibles no hace más que subrayar que fueron estas columnas un modo de ejemplificar con algunos y distintos puntos de vista sobre lo que si analizo encuentro: qué cosas me apagan, dicho así para graficar fácilmente, o qué cosas me encienden, avivan la llama que pretendo disfrutar, aplicar y regalar a otros. El conocimiento de esos factores y esas personas y la influencia que sobre mí ejercen hará que los busque, interactúe con ellos o los evite, según sea el caso.

Pero quedará siempre expuesto el que soy cien por ciento responsable de mi energía, en contraposición a lo que también podría acudir, el sólo señalar factores externos que no puedo dominar y que anularían mi iniciativa como aquí se quiso expresar. Es verdad que el clima, la macroeconomía o familia cercana pueden parecer condicionantes indomables. Pero hasta en esos casos la relativización, el procurar cercanía o lejanía o ayudar al cambio de perspectiva del otro pueden destacar la influencia que sobre eso puedo tener. No existe justificativo para carecer de energía o para sufrir el exceso de ella. Soy responsable de mi propia energía.

Y en el disfrute de la felicidad estaré dando un empellón importante si me convenzo que siempre podré tener la energía que necesito y quiero tener.

 

CARLOS GIL COACH, La Granja, Sierras Chicas de Córdoba, Argentina, 24 de octubre de 2019

  

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