La gente se queda a dormir en el hospital Rawson durante días para conseguir un turno con el neurólogo pediátrico. Cada turno vale oro porque en toda Salud Pública de la Provincia trabaja sólo un médico con esta especialidad. El doctor Domingo Castro atiende las consultas, revisa a todos los pacientes internados y también opera. El drama de la falta de pediatras especializados ha llevado a las autoridades a tentar a médicos de todo el país para que vengan a San Juan, hasta ahora la iniciativa no tenido éxito.
La falta de neurólogos pediátricos es un drama que tiene preocupadas a las autoridades del ministerio de Salud. Hasta el 2010 trabajó en el hospital Rawson junto a Castro la doctora De los Santos, una sanjuanina que estudió en la Universidad de Córdoba. La neuróloga pediátrica estuvo dos años asentada en la Provincia pero luego decidió emigrar ante mejores ofertas laborales. Tras la renuncia de De los Santos, no han logrado seducir otro profesional para que trabaje en la parte pública.
A pesar de que el doctor Domingo Castro ha aumentado la cantidad de turnos que da semanalmente, no puede satisfacer la demanda. Hay pacientes que llegan desde departamentos alejados buscando un turno y deben quedarse semanas para conseguir la atención del especialista.
Para colmo, la demanda en neurología pediátrica viene aumentando sostenidamente en los últimos años producto de las derivaciones que realizan las maestras. Según informó el ministro de Salud, Oscar Balverdi, las docentes ante cualquier problema de aprendizaje o de conducta de los chicos, los derivan al neurólogo pediátrico. A estas consultas se les suman las de niños con tumores o problemas en el cerebro, que sí o sí requieren de la atención de un especialista infantil.
Muchas veces ante la desesperación, las madres les piden a las autoridades del hospital Rawson que los atienda un neurólogo común. Esto es imposible porque tanto el cuerpo como la mente de un niño funcionan de manera diferente que un adulto.
Una consulta con un neurólogo infantil puede llegar a costar entre $400 y $500 en la parte privada, un costo bastante alto para pacientes con problemas económicos.
La falta de neurólogos pediátricos es una realidad que afecta a todo el país. Es que son cada vez menos los médicos que se inclinan por este tipo de especialidades que requieren de muchos años de estudio. Una residencia en pediatría y en neurología, lo que implica al menos 6 años más que se le suman a la carrera convencional.
A esto se le suma la cotización que tienen los especialistas infantiles. Apenas se reciben son tentados por centros médicos de todo el mundo para que vayan a trabajar. De la Universidad de Córdoba se recibió un sanjuanino de cardiólogo infantil, el médico fue tentado por varios sanatorios, hospitales y clínicas argentinas pero decidió emigrar y partió a Brasil, donde reside actualmente.
En la parte pública sanjuanina también se vive una situación similar con los cardiólogos pediátricos. Hay dos especialistas que trabajan en todos los hospitales y centros de salud. El otro faltante se produce en la especialidad gastroenterología infantil.
CIFRA
1 neurólogo pediátrico trabaja en todos los hospitales públicos de la Provincia. El doctor Domingo Castro atiende las consultas, opera y revisa a los pacientes internados.