Tras estar en boca de todos como un presunto
abusador, perder su trabajo como coordinador dela empresa de viajes
estudiantiles Travel Rock y preso durante dos meses en la Central de Policía,
Germán Crubellier pedirá un resarcimiento económico por los daños causados,
tras ser encontrado inocente por la Justicia en el caso de abuso sexual de una
menor, de 17 años, quien junto a su madre lo denunciaron en septiembre,
iniciando una odisea legal que terminó en diciembre último.
Según adelantó a Tiempo de San Juan el abogado
del joven, Horacio Merino, "está decidido que vamos a presentar una acción
judicial civil. Queremos que sea una sanción ejemplar”. Están ultimando los
detalles de la presentación que aún no tiene montos, pero que prevén apuntar
hacia la familia denunciante por todos los daños ocasionados tras la denuncia.
Según Lozano, Crubellier "carga con el estigma” que le dejó tremenda
imputación, lo que llevó a que su cliente quedara desempleado apenas se supo
del caso.
Germán Crubellier y su abogado Horacio Merino.
Todo empezó el
22 de septiembre último, cuando el entonces coordinador fue detenido
cuando se dirigía a las oficinas de su trabajo en pleno centro. El muchacho se
desempeñaba también como RRPP de dos
conocidos boliches sanjuaninos. Los efectivos de la División Seguridad Personal
lo detuvieron porque una menor lo acusaba de haberla violado en una "previa”,
en una casa de Capital, el 16 de septiembre último.
El juez Benito Ortíz del Primer Juzgado de
Instrucción, tras la investigación, entendió que no había pruebas válidas en
contra del coordinador, y los testigos y la Cámara Gessel por la que pasó la
menor, favorecieron a Crubellier. También hubo peritajes en los celulares de
una amiga de la chica y de la misma presunta víctima sobre las conversaciones.
El acusado declaró que fue una relación consentida. Luego vino el
sobreseimiento y la parte querellante no apeló, por lo que la declaración de
inocencia quedó firme y el terreno allanado para la demanda civil.