El caso del crimen del pequeño Kevin Borquez tiene un revés por éstas horas luego de que se conociera que los acusados por la muerte del niño desaparecieran.
Deolinda Godoy, de 26 años y su ex pareja, Gerardo Riveros, de 28 años, fueron condenados a 15 años cada uno por la muerte del niño, el 3 de mayo de 2011.
Cuando la Corte de Justicia decidió darles la libertad se podría haber estirado la prisión preventiva un año más y ambos acusados hubieran esperado el juicio y la condena presos, y no hubieran tenido posibilidad de escaparse.
Ambos habían estado presos por el crimen de Kevin, pero a los 2 años y seis meses la Corte los liberó porque entendió que podían estar en libertad hasta el juicio. Llegó el juicio y la pareja fue condenada a quince años, apelaron el fallo y fueron a la Corte, quien dictaminó que estaban bien condenados.
Hace una semana el juez Atenágoras Vega de la Sala II de la Cámara Penal ordenó recapturarlos para que vayan a la cárcel y cumplan la condena, pero ahora no los encuentran. Fuentes policiales indicaron que a lo mejor Deolinda y Gerardo podrían haber huído a San Luis o Mendoza, pero su paradero es incierto.