El dueño del caballo que desató la triple tragedia, en la que murieron una mujer y sus dos hijitos, se abstuvo de declarar y sigue preso en la Seccional Novena, de Caucete.
Hermes Ibáñez hizo uso de su derecho a no dar ninguna explicación ante la jueza Carolina Parra, del Segundo Juzgado Correccional, donde se lo investiga por homicidio culposo.
Mientras se toman medidas probatorias, la jueza Parra decidió que Ibáñez siga privado de su libertad.
La policía llegó a Ibáñez gracias a la marca que el animal tenía al momento de ser impactado en la Ruta 141, en Bermejo, por el Chevrolet Corsa familiar en el que viajaban Ana Beatriz Yossa y sus dos hijos, Santiago y Ernestina. El auto era conducido por su marido, Federico Aguilar.