El esquema queda de la siguiente manera: hasta el 30 de junio, los autos por debajo de $195.500 de precio de fábrica (antes de impuestos y comisiones) estaban exentos. Entre ese valor y $ 241.500 pagaban una alícuota del 30%. A partir de ese monto, la alícuota a pagar era del 50%.
Ahora se subió la base imponible en un 15%, por lo que la nueva escala de valores queda en $225.000 para el primer caso y $ 278.000 para el segundo. En la práctica, significa que el tributo alcanzará a los vehículos que tengan un precio al público a partir de alrededor de $ 340.000 y de $ 457.000.
El cambio más importante es que por primera vez se diferencia entre autos nacionales e importados. Ahora, los vehículos de producción local dejarán de pagar la alícuota del 30% por una de 10% mientras que los afectados por la del 50% pasan al 30%.
Los modelos beneficiados con esta prórroga son:
Citroën C4
Honda HR-V
Ford Focus Titanium
Peugeot 408
Renault Fluence
Focus Serie II
Toyota SW4
Vito de Mercedes Benz