Un mes después de que el león Cecil muriera cazado por el dentista estadounidense Walter James Palmer, el león que ocupó su lugar en la manada, Jericó, habría sido abatido este sábado.
Jericó era el hermano y segundo león de la manada liderada por Cecil, el león insigne de Zimbabue. Al morir este, Jericó ocupó su lugar como macho alfa.
En estos momentos, la organización de conservación del Parque Nacional de Hwange, en Zimbabue, investigan si el hecho efectivamente ocurrió.
Según informó hace minutos el diario español El País, el investigador de campo en el Proyecto de Investigación de Leones de Hwange ha comunicado que el león podría seguir vivo ya que el GPS que el animal tenía colocado sigue en funcionamiento.
Si bien la novedad puede cambiar con el transcurrir de los minutos, en estos momentos muchos medios del mundo ya dan por muerto al león Jericó.