Una chica de 13 años fue víctima de una brutal golpiza a la salida de su colegio en Manchester, Reino Unido, y ahora se niega a volver a clases debido al trauma de haber sido atacada un una compañera de curso.
La víctima fue identificada sólo como Terri- Mae Lunt, una alumna del Manchester Creative & Media Academy, informó el sitio inglés Daily Mirror. Una grabación de la pelea, que ocurrió el 11 de mayo, fue publicada esta semana en las redes sociales.
La adolescente intentó suicidarse porque en la escuela la llamaban "zorra" y su padre no podía creer las lesiones que sufrió tras ser atacada por su compañera a metros de la puerta del colegio. "Tenía moretones en la cara, en el pecho, en los brazos y marcas de mordeduras. Tuvo suerte de no tener nada roto", expresó Terry Lunt.
Lunt y su mujer, Melanie, denunciaron el episodio a la Policía y se fijó una audiencia para mediar entre las partes, pero cuando la otra chica apareció junto a sus padres y un abogado, la pareja decidió presentar cargos penales.
La agresora fue identificada como Georgina Hagan, de 13 años, cuyo padre, Paul Hagan, culpó por el episodio a la escuela por dejar que se acumulara la tensión entre las dos alumnas de la academia de la localidad de Blackley, en Manchester.
Hagan afirmó que las chicas tienen problemas desde 2013, aunque no se supo si este fue el primer episodio de violencia. "Georgina cambió mucho en estos dos años. Se volvió muy retraída", aseguró el hombre al mismo sitio.
"Terri -Mae le tiró del pelo y después Georgina se desquitó, como se puede ver en el video", aseguró el padre de la agresora, quien fue suspendida durante una semana tras la pelea. "No estoy diciendo que lo que hizo está bien. Me impresionó la violencia del video. Me preocupa qué hace que una jovencita actúe de ese modo", convino.
Pero los Lunt no están tan convencidos de la explicación del señor Hagan y la Policía ya entrevistó a unos 60 alumnos acerca de este episodio.
Desde la escuela afirmaron que se trata de "un tema para la Policía" porque ocurrió afuera del edificio y después de clases.
Fuente: Minuto Uno