Para quienes tienen más de 25 años, es imposible no recordar los deliciosos helados de Soppelsa. En los días de verano era un clásico pasar por alguno de los locales de la heladería. La buena noticia para los fanáticos del helado es que nuevamente van a poder probar un Ferruccio Soppelsa en San Juan. El 17 de febrero abre la primera sucursal de al menos 4 negocios más.
El primer local está ubicado en el patio San Ignacio (Ignacio de la Roza y Hermógenes Ruiz). El propietario, el reconocido médico Ricardo Mazzanti, contó que están trabajando contrarreloj para dejar el local hecho un chiche para la apertura. La idea es que la gente pueda disfrutar de los espacios verdes del centro comercial, para eso han dispuesto la colocación de mesas y sillas al aire libre. Tendrá una cartelería que prometen que será "impactante”. También colocarán sombrillas, para respetar esa estética tan característica de las heladerías.
La idea es trabajar de lunes a lunes en horarios extendidos y también llevar pedidos a domicilio. Brindar un servicio de calidad, acorde a la marca que representarán en San Juan, es el objetivo del empresario sanjuanino que decidió apostar por la apertura de una clásica heladería.
Ferruccio Soppelsa es una empresa dedicada a la elaboración de helados de primera calidad, la sede está en Mendoza. La fábrica tiene cuatro pisos, la producción se realiza en el último piso y a través de un tecnológico sistema de tuberías la materia prima recorre los distintos niveles de la empresa.
"Ofreceremos más de 40 gustos de helados, pero la propuesta no estará limitada solo a los helados sino que también ofreceremos pastelería de primera calidad, tragos fríos con helados, será una confitería y heladería”, adelantó Mazzanti.
El empresario dijo que los propietarios de la firma de helados mendocina están muy entusiasmados con la apertura de una franquicia en San Juan. "Los hermanos Ferruccio-Soppelsa querían hacer pie acá, para nosotros es una apuesta muy importante. Este será el primero de una serie de heladerías más”, explicó el profesional.
Los inversores no eligieron al azar el patio San Ignacio como sede de la primera franquicia de Ferruccio-Soppelsa. La explosión comercial del oeste sanjuanino pesó a la hora de decidir la zona, además las características propias del comercio convierten al nuevo paseo en el ideal para el desarrollo de este negocio.
La historia de Soppelsa
En 1927 Güerino Soppelsa llegó a Mendoza. Sirvió a las tropas italianas durante cuatro años en la primera guerra mundial. Previo al Ejército, recorrió las principales ciudades europeas y aprendió todos los secretos de los heladeros más reconocidos. Con ese bagaje de conocimientos llegó a Mendoza, donde con casi 40 años, abrió una heladería. Así nació la empresa, 89 años atrás.
La compañía fue la primera que vendió helados en un camión en la puerta del Parque mendocino y es considerada la primera heladería artesanal de todo el país.
"Ferruccio Soppelsa pretende lograr un crecimiento del 20% de franquicias por año. Tenemos dos formatos (Master y Express) dependiendo del punto de ubicación, tamaño e inversión. La idea es abrir de dos a tres franquicias por año, que nos permitan crecer hasta un 10% en las ventas anuales”, adelantó Héctor Soppelsa, gerente general y socio de la compañía, al medio Sitio Andino.
Hoy Soppelsa posee un potencial anual de producción de 500.000 litros por año, lo que la convierte en líder regional del mercado de helados artesanales. Sus ventas se reparten 60% en el canal minoristas y otro 40% en el mercado mayorista, principalmente gastronomía, hotelería, salones de fiestas, entre otros.
Soppelsa emplea de manera directa a 60 trabajadores, y si a eso se le suman los empleados que ocupan las 10 franquicias, la marca le da trabajo actualmente a unas 100 personas en la región de Cuyo.
En la actualidad, la empresa cuenta con 11 locales distribuidos en Ciudad, Godoy Cruz, Maipú y Luján, además de los dos camiones que trabajan en el Parque General San Martín y un local en San Luis. A estos negocios se les sumarán las franquicias sanjuaninas.